Este libro está dedicado a los refugiados indígenas de Guatemala que la autora encontró en la finca Kolchaj Nak Lu´um, en México. La obra es semi-documental, pues muchos de los acontecimientos descritos en sus páginas sucedieron. La violencia que aquí se describe fue verdadera y puede ser confirmada por muchas fuentes. Una sociedad nueva y justa jamás se puede construir sobre el olvido. Este libro, basado en historias terroríficas, es también un libro sobre el valor, la solidaridad y la esperanza.