Todo en esta obra es marea y agua. Es captura de espíritus como peces mágicos de viento interacuático.
Así pues, el trasmallo será aquello que recogerá cada alma de esta aventura a la pesca de la «palabra nueva»: a-quella forma de advertir un descubrimiento de manera sencilla por medio del poema. Nos encontramos ante un poemario excelso, mágico, lleno de espiritualidad y conocimiento. Bebamos, entonces, de la ambrosía que propone: ese océano insondable o gota de lluvia mi-núscula, dependiendo del ojo, en cada copa.