La primera estadía en Europa de Virgilio Rodríguez Macal definiría su interés por los acontecimientos en el continente europeo, en especial la Segunda Guerra Mundial. Rodríguez Macal gana con Negrura, en 1958, el certamen literario “Pedro Antonio de Alarcón”, de Madrid, España y su obra se publica en ese país un año después, tan solo una edición. La novela trata sobre las consecuencias que la Segunda Guerra Mun- dial tuvo en los ciudadanos alemanes, después de terminada la guerra, en 1945, y se desarrolla probablemente en Hamburgo. Las acciones se desarrollan bajo un matiz pesimista, como el del título. Fred, el prota- gonista, es un excombatiente que sale físicamente ileso de la guerra, pero afectado emocionalmente se emplea en una fábrica, en donde la mayoría de sus compañeros de labores son excombatientes lisiados y resienten la integridad física de Fred. Él los comprende pues sabe la ne- grura que se ciñe en sus corazones, similar a la profunda depresión que él mismo siente por la soledad en la que lo ha dejado la guerra. Negrura es una novela psicológica sobre las secuelas que dejó la Segunda Guerra Mundial en el pueblo alemán, de los traumas de los alemanes que en el encuentro armado sufrieron lesiones físicas y psíquicas. El autor se vale de elementos de la psicología actualizada de ese entonces e, incluso, se adelanta a ella por varios años. En su soledad ese Fred/Alemania se en- cuentra emocionalmente partido entre su pasado bélico y un presente prometedor. La Alemania de posguerra que se construye en la novela, a través de las alegorías de sus personajes, no es una nación consolidada pues sufre traumas, mutilación, falta de espiritualidad y fragmentación, lo que se manifiesta finalmente en la partición de Berlín, la capital, sím- bolo de la subsecuente Guerra Fría.