"Tomó el revólver y apuntó al sol. Y así, como si nada, apagó la luz para siempre y entonces... escribir fue lo único que mereció la pena." Para mi el arte es como un revólver y entre las siguientes páginas muestro la evidencia de mis disparos. Disparo para sanar heridas, para despistar a la muerte y que mis balas queden alojadas dentro de alguien más para siempre. Soy lo que escribo, porque escribo lo que siento y no encuentro mejor forma de expresar mis sentimientos, más que disparándolos sobre hojas en blanco.