Simón Bergaño y Villegas, poeta y periodista, precursor de las ideas de independencia y crítico enconado contra el conservadurismo de la sociedad colonial americana. Desarrolló una importante tarea como redactor-editor de la Gazeta de Guatemala (1804-07), abordando temas variados en lo económico, educativo y social. El 23 de octubre de 1808, gracias al celo puntilloso del Tribunal del Santo Oficio, la Audiencia de Guatemala lo acusó de “díscolo, revoltoso, agitador de ideas perniciosas y sedicioso”. Sus pertenencias (en su gran mayoría libros) fueron rematadas para cubrir los gastos del juicio. Condenado, fue remitido a España, pero en el trayecto, por motivos de salud, lo dejaron en la Habana, donde ejerció el periodismo y publicó algunos poemas. Allí falleció veinte años después.
Irónico e ingenioso, su escritura es el antecedente de la de José Batres Montúfar.