De pronto, una palabra rara, nunca antes escuchada, define la vida de Ita, una exitosa abogada guatemalteca que atraviesa los supuestos años de madurez de los cuarenta. Esa palabra, fibromialgia, da nombre a la experiencia del dolor que Ita intentará describir y comprender. El dolor del cuerpo conducirá a la protagonista de la novela a recuperar el pasado de su familia, especialmente a descifrar el abandono de la madre, una conocida artista que, por razones oscuras, dejó la carrera en pleno conflicto armado guatemalteco.
Recorrer el pasado implicará adentrarse en los archivos y los afectos de una infancia marcada por una sociedad jerárquica y violenta. La investigación de Ita sobre su propia madre la llevará a descubrir la impostura de la inocencia cuando se vive una guerra, pero también a transformar una amistad de la infancia en una historia de amor que reta las expectativas tradicionales del mismo.