Con esta obra, la continuación esperada de El poder del ahora, Eckhart Tolle nos enseña que tenemos la oportunidad de construir un mundo nuevo y mejor con libertad y alegría. Lo que supone una revisión radical del papel de la conciencia, identificada con el propio ego, que debería convertirse en el instrumento de una comprensión distinta y más profunda de quienes somos. El estado de conciencia que propone no sólo es esencial para la felicidad, sino que es clave para acabar con los conflictos y el sufrimiento del mundo. Nos muestra cómo nuestra fijación con el ego crea enojo, celos y tristeza, pero también nos señala el camino para una plena realización personal. Un profundo manifiesto espiritual para mejorar nuestra vida y construir un mundo deseable.