Un cartel cuelga de una vieja casa y previene sobre el peligro de su derrumbe. El caserón ha sido el patio de juegos y aventuras para unos inseparables amigos. Ellos están encariñados con aquel lugar que a nadie más parece interesarle, ya que está hecho una ruina. La antigua dueña llega un día sin previo aviso. Los amigos se encontrarán en medio de un evento que cambiará sus vidas para siempre, y comprenderán que la comunidad solamente puede valorar el pasado cuando se reconoce la importancia de las cosas sencillas y se antepone el bien común al individual.