En una ciudad donde la corrupción, el abuso y la violencia son el pan nuestro de cada día, un cura ayuda y escucha a gente que busca alivio al confesar sus pecados contando sus dilemas. Él, a cambio, solo pide un plato de comida caliente. La sociedad en la que interactúan es la misma en la que viven cotidianamente millones de personas; llena de contrastes, con personas que luchan diariamente con sus problemas morales y económicos; una realidad que se adapta a cualquier país latinoamericano.