Advertirá el lector, el lector preparado para encaminar su inteligencia a retroceder un siglo y situarse en París en 1894, año en el que Enrique Gómez Carrillo publica su libro: "Estudios Cosmopolistas". No se trata de texto alguno de investigación o interpreación literaria, sino de una colección de la obsercacino expuesta en el estilo de la crónica en la que traa el carácter del mundo de los escitores y el de las mujeres qué dan qué decir a los escritores, sirviendo de modelos a los "Impresionistas" del color y de insipiración para los poétas.
Ahora estamos en 1994. Un siglo después de aquella época y nos hallamos en Guatemala - patria de Gómez Carillo - y las circunstancias no sllevan a tener al alcande la mano la obra del pintos Juan José Rodríguez. Y entre la obra de este gambusino e color, un cuadro. Una pintura que en su dilatada extensión hipotética expresa todos los encantos y atractivos de la mujer y nos acerca a los textos de Gómez Carrillo en el que el escritor dibuja la silueta de la mujer multidinaria y escribe las páginas de sus cuatros libros de las mujeres.
