LAS PROTAGONISTAS DE ESTAS HISTORIAS tienen varios elementos en común, aunque no lo sepan y mucho menos se conozcan. Usted seguramente se las ha encontrado durante un viaje en el transporte colectivo o en un taxi; quizá saludó a alguna, quizá las haya visto en el súper, comprando sopas instantáneas chinas, o en las escaleras eléctricas de algún mall. Probablemente llame a un call center y una de ellas le resuelva un reclamo a deshora. Son personajes actuales, posmo-dernos, con una vida cotidiana silenciosa y solitaria.
Permanecen anhelando el mar, la lluvia las moja cuando quieren y se dejan llevar por las calles y avenidas de una cuidad que también es protagonista.
