En la presente encrucijada en que se encuentra El Salvador es imprescindible leer textos como Tomamos la palabra y escuchar estas voces para reexaminar, entender, ver la historia a través de la polifonía de vivencias durante 12 años de una guerra que ha marcado profundamente a El Salvador, desde niveles afectivos hasta las relaciones de poder ya sea de género o clase. Estos testimonios son las nuevas brújulas, el punto de partida de nuevos parámetros reivindicativos necesarios para continuar esa lucha inconclusa. El presente libro es el resultado de un proceso que comenzó en 2011 con la finalidad de llevar a cabo la recopilación de testimonios de mujeres que vivieron o participaron activamente en la guerra civil que azotó El Salvador en la década de los ochenta. La idea de publicar un libro que recogiera las voces de mujeres que tomaron parte en el movimiento de resistencia responde tanto a intereses personales como académicos. Nuestro propósito fundamental es rescatar las vidas y experiencias de las mujeres anónimas, desaparecidas, encarceladas, asesinadas o condenadas al exilio; mujeres que dejaron sus casas, perdieron a sus seres queridos en la guerra y aquellas que tuvieron que abandonar sus profesiones y estudios, y decidieron incorporarse a la lucha sea frontal o desde otros espacios.