- Editorial:
- PALIBRIO
- Año de edición:
- 2013
- Materia:
- Novela hispanoamericana
- ISBN:
- 978-1-4633-4816-8
- Páginas:
- 346
- Encuadernación:
- Epublication content package
TELARAÑA
RAFAEL VIDARTE GONZÁLEZ
En el seno de una familia de clase media de la ciudad de Granada, se preparan varios cambios bruscos que van a alterar muy significativamente las vidas de sus miembros. El padre de familia, Wenceslao Peláez, un ejecutivo medio de una compañía de promoción publicitaria, está a punto de perder su empleo de toda la vida por culpa de una ejecutiva agresiva Brígida- que acaba de recalar en su empresa: Publimarket con la determinación de trepar a lo más alto de la dirección. Su familia (de Wenceslao), que en el momento del comienzo de la trama, se mantiene en un equilibrio precario, está formada por: Candy, esposa de Wences, madre de familia con escaso convencimiento de su rol, oscilando entre las ansias de emular sus tiempos de juventud -a veces con aventuras esporádicas- y el intento de mantener a toda costa la unidad familiar. David, el carismático hijo menor de la saga, estudiante de informática -a la fuerza- que se encuentra inmerso en un frenesí de botellón y trapicheos nocturnos y que un día conoce a una chica que le obsesiona. Cheli, la hija mayor, muy apegada a su padre, Wences, y que mantiene una mínima cohesión familiar. Estudiante en la Escuela de Protocolo de Granada y con pareja estable, se debate entre varios conflictos: la pésima relación con su hermano, David, el dolor de ver cómo su padre, con quien siempre ha mantenido una estrecha relación, atraviesa cambios bruscos y desconcertantes, y la sensación de responsabilidad hacia su madre, a quien ve muy perdida y tratando infructuosamente- de salvar en lo posible los muebles familiares. En un momento dado, Wences es despedido de la empresa; pero es agraciado con un gran premio en la lotería que sólo revela a Candy- y con el que decide fundar una cadena de TV local, un proyecto que le atraía desde hacía varios años. Mientras tanto, David consigue salir con la chica de sus sueños, Almudena, empieza a trabajar como repartidor de pizzas a domicilio y deja la universidad. Tras varios meses de trámites salvando obstáculos burocráticos, Wences consigue inaugurar una cadena de TV local, llamada MundoGranada , que, desde el principio, consigue un enorme éxito de audiencia. Mientras tanto, se van alienando las relaciones familiares, creándose un clima frío y distante entre los cuatro. Wences se encandila con una joven becaria ucraniana llamada Nadia, y Candy se va a Italia en pos de un romance loco con Massimo, un turista italiano a quien ha conocido en Granada. La emisora tiene tanto éxito que las otras cadenas locales ven su Share notablemente reducido; por fin se reúnen sus responsables con altos ejecutivos políticos y empresariales de la ciudad para fraguar un plan de sabotaje. El director-gerente de Publimarket , antiguo jefe de Wenceslao, José Carlos Canales, está presente en el encuentro y, junto con Brígida, juega un papel fundamental en el complot. Una noche, la sede de la emisora MundoGranada en Cumbres Verdes, arde hasta los cimientos, presa de un incendio provocado. A pesar de sus esfuerzos por esclarecer la verdad de los hechos, Wences se topa con un muro inexpugnable: poderosas familias locales impiden que se lleve a cabo una investigación completa y se depuren responsabilidades. Poco antes, David, desencantado con su vida actual y con la sociedad en la que se mueve, ha contactado con un grupo de parejas británicas que tiene como proyecto abandonar su lugar de origen en U.K. e irse a vivir a una isla deshabitada para empezar desde cero una comunidad alternativa. A pesar de la oposición inicial por parte de Candy, al fin consigue el permiso y la ayuda económica necesaria de sus padres. Finalmente, ante la peligrosa situación generada y la incertidumbre de las que podrían repetirse, Wences decide no poner en más riesgos por ataques de sabotaje al personal de la emisora y la cierra definitivamente. En un encuentro final con su antiguo jefe, Wences, que se había enterado de la participación de aquel en el crimen, le escupe a la cara su indignación, y continúa su camino, esta vez con la posibilidad abierta de compartirlo con Nadia, mientras Candy abandona una última esperanza de mantener la unidad familiar tal y como era antes
