¿Qué tiene que suceder para que nos veamos obligados a redefinir nuestra idea de la infancia? La aparición de treinta y dos niños violentos de procedencia desconocida trastoca por completo la vida de San Cristóbal, una pequeña ciudad tropical encajonada entre la selva y el río.
Veinte años después, uno de sus protagonistas redacta esta República luminosa, una crónica tejida de hechos, pruebas y rumores sobre cómo la ciudad tuvo que reformular no solo su idea del orden y la violencia sino hasta la misma civilización durante aquel año y medio en que, hasta su muerte, los niños tomaron la ciudad.
Tensa y angustiosa, con la nitidez del Conrad de El corazón de lastinieblas, Barba suma aquí a su habitual audacia narrativa la dimensión de una fábula metafísica y oscura que tiene el aliento de los grandes relatos.