Esta obra, abundante en símbolos y contemplación, es un obsequio de resiliencia tras desvelarse la verdad de Maurus y sus intenciones para con Inés. Sin embargo, Luto Blanco está presente de manera omnisciente, como una bruma que aparece y desaparece, que observa y sirve como suerte de consciencia para la toma de decisiones literarias. Y es que nada sucede si Luto Blanco no lo permite; todo sucede si así lo desea el personaje. Luto Blanco debe leerse con atención, pues su brevedad no explica la riqueza literaria de la autora, quien se ha caracterizado por extremar medidas en cuanto a su propia creación. Pineda, siempre insatisfecha, busca rutas de escape llevando su exigencia formal a niveles absolutamente impresionantes. Pineda es una autora de culto; posee un público selecto y de buen gusto, además de poseer menciones en ensayos académicos sobre mujeres escritoras en Guatemala. Su proyección es imparable y con absoluta seguridad el tiempo será gentil y revelará a los lectores el tesoro que guarda su narrativa y poesía, única en su género. Luis Pedro Villagrán Ruiz
