Esta obra, al igual que su precuela -Las aventuras de Tom Sawyer-, que fue escrita ocho años antes y dio a conocer a sus dos jvenes protagonistas. Tom y Huck, supone un canto a la libertad y a la rebelda, una o da a las ilusiones ocultas de cada lector, y lo hace a través de personajes inolvidables que hacen gala de una vitalidad envidiable, y nos llevan, entre sueños, a los momentos más íntimos y entrañables de nuestra juventud. Twain revive su propia niñez y adolescencia, añadiéndole unas magistrales pinceladas de ficción.