Esta novela cuenta la historia de dos niños de la calle que se enfrentan día a día la vida ante una sociedad que se muestra indiferente. La flaca tiene ojos verdosos y un rostro trigueño surcado por rayas de mugre. Jaime deja atrás su vida en el campo para llegar a una ciudad desconocida. Entre ambos surge una amistad que les ayuda a sobrellevar las dificultades. Con este libro la autora invita a reflexionar sobre el respeto y el valor de la infancia.