La historia contenida en esta novela, sus personajes y sus nawales, los sitios y los datos aportados, nos demuestran visión, religiosidad y el contenido de las profecías mayas para el año 2012, aportándonos, además, la visión ancestral de los habitantes originarios de Canadá donde reside, que son confluentes y logra amalgamarla con la nuestra.
En la Llave, nos desvela, con singular dominio de la narrativa, interioridades de ambos países, los que ha recorrido con la inquietud de saber más acerca de las relaciones entre sus habitantes primarios, desde tiempos inmemoriales.
Con admiración y respeto nos habla de los Mayas, esos que inventaron el cero, construyeron el calendario más exacto, hasta nuestros días, y supieron leer la posición de los astros, conociendo los períodos de siembra y aportando a la humanidad sus Profecías, esas realidades, propias del realismo mágico de estos parajes.
Ha investigado detalladamente esas costumbres ancestrales y las ha conectado con una trama con vínculos internaciones, cuyo desenlace nos sorprende agradablemente, invitándonos a conocer más acerca de este apasionante tema.
