Larsen, conocido como Juntacadáveres, llega a Santa María con Irene, Nelly y María Bonita, tres prostitutas entradas en años con las que monta un burdel. No se trata de un lugar cualquiera, dedicado al simple desahogo sexual, o al menos eso es lo que pretende Larsen. Allí, gracias al saber hacer de las viejas meretrices, los hombres conocerán el paraíso y alcanzarán la felicidad.
Esta excéntrica empresa se topa con la oposición implacable de las gentes de bien, como el padre Bergner, cuyos sermones incendiarán los ánimos de los parroquianos.
La opinión de otros autores:
«El más grande novelista latinoamericano.»
Julio Cortázar
«En todos los cuentos de Onetti se esconde un secreto, y ese secreto escondido no se puede contar. En esas supresiones radica muchas veces el éxito de una narración.»
Mario Vargas Llosa