Frin acaba de entrar a la escuela y tiene un nuevo amigo, Lynko. Ambos comparten los mismos gustos y enemigos. Además, disfrutan mucho de andar en bici y están enamorados: Frin de Alma y Lynko de Vera. Alma tiene problemas en casa, y sus papás la envían a vivir temporalmente al pueblo de sus abuelos. Aunque Frin se entristece, descubre la forma de ir a visitarla. En ese lugar conoce y aprende cosas nuevas e inolvidables.