En el universo narrativo de Exposición de atrocidades tres artistas plásticos entran en contradicción irresoluble con la sociedad mediática y consumista, que comprende el arte como un objeto suntuario.
Eduardo crea en estos tres personajes –Goya, Bauhaus, y Popart- el arquetipo de un ser contestatario, pero a la vez enmarañado, derrotado. Los protagonistas influenciados por el alcohol y las drogas deciden montar una exposición para mostrarnos las múltiples atrocidades que limitan nuestra conciencia social.
Esta espléndida novela está ambientada en la Guatemala de finales del siglo XX. En un país convulsionado los pintores, luego de varias peripecias, montan su famosa exposición en los bajos del Palacio Nacional.
Un caótico desenlace se anuncia en estas páginas, como en nuestra propia historia. Así, el autor –con un oficio narrativo magistral- nos coloca frente a un espejo, ¿cómo será nuestro reflejo?
-Armando Rivera