Una lluvia ácida cae sobre Makesicko City, la urbe más poblada y más contaminada. Los mecanismos de control político son implacables y la manipulación mantiene a las masas enajenadas en festejos y concursos, uno de ellos, el premio a la pareja cuyo hijo nazca en el primer minuto del 12 de octubre. En el vientre de su madre, donde cavila y desde donde percibe los fragores del mundo, Cristóbal se pregunta: ¿vale la pena nacer?