La autoestima no es innata, sino algo que el niño comienza a aprender poco después de su nacimiento, a través de su experiencia circunstancial, del tratamiento que recibe y de su intercambio con el entorno.
Y la va forjando en la interacción entre su desempeño y el valor que se asigna a sí mismo como persona.
En este libro Carl Pickahardt ofrece a padres y maestros estrategias para reforzar esas capacidades en hijos y alumnos.